El maní es un cultivo económico valioso que se cultiva ampliamente en las regiones tropicales y subtropicales de Asia, África y América del Sur. Debido a su alto contenido de aceite, el maní sirve como una importante materia prima para alimentos, piensos y producción de aceite. Sin embargo, la producción de maní a menudo enfrenta amenazas de diversas enfermedades, plagas y malezas, que pueden afectar gravemente el rendimiento y la calidad.